Esta Vuelta a España está siendo la más divertida de los últimos años y desde mi punto de vista durante este 2017 la más entretenida de las tres grandes.
Pero esta Vuelta además de espectáculo está dando paso a futuras promesas del ciclismo nacional, algunos de los cuáles durante este 2017 ya los hemos mencionados en este blog como Rosón, Marc Soler y Enric Mas. Pero del que no hemos hablado porque hasta ahora no había destacado era del catalán Antonio Pedrero.
El catalán de 25 años bajos los colores del Lizarte fue una de las estrellas del ciclismo amateur consiguiendo dar el paso al campo profesional en Julio del 2015 de la mano del conjunto continental Itenja – MMR.
En una de las primeras pruebas que corrió ya dio muestras de su calidad ganando una etapa en el Tour de Guadalupe, que es una vuelta sin mucho nivel pero con carreras muy locas donde hay que tener calidad para poder estar en los puestos cabeceros.
El Movistar ya llevaba fijándose en él desde su época amateur y al ver el rendimiento que estaba teniendo con el Itenja – MMR decidieron pasarlo a su escuadra.
El primer año fue un ciclista más haciendo sus labores de gregario al igual que durante este 2017. Con el paso de la presente temporada Pedrero estaba demostrando que cada vez era un ciclista más sólido, especialmente en etapas donde la carretera se empinaba.
En esta Vuelta a España se está consagrando como uno de los mejores escaladores españoles y con un gran futuro por delante. Muestra de ello es que en la etapa de terminó en las Cumbres del Sol y la de ayer en Sierra Nevada fue el mejor clasificado del equipo Movistar.
Los “entendidos” dicen que tras los Purito, Contador, Valverde… ya no habrá espectáculo, pero yo estoy convencido que si, la cantera española es muy buena y el ramillete de ciclistas que está saliendo a buen seguro seguirán dando guerra. Esto me recuerda a la época en la que Induráin se retiró y la gente pensaba que ya se había terminado el ciclismo español.
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