Os dejo la experiencia vivida por el triatleta (ya ha realizado su primer triatlón y podemos nombrarle con ese nombre) David Repiso que debutó hace un par de fines de semana en el Triatlón de Sevilla. ESte deportista montillano y amantes de los deportes de resistencia ha querido compartir con nosotros su experiencia que a buen seguro os traterá a muchos de vosotros grandes recuerdos.
Me llena de orgullo el que me hagas un hueco en tu espacio web para expresar la experiencia de un iniciado deportista en su primer triatlón, nada menos que la cita de cada año en una ciudad muy bonita, Sevilla. Ante todo mi expectación fue Nada más llegar, increíble como estaba todo tan bien organizado para tanta gente, tantos deportistas que se daban cita ese día y cada cual imagino que con un propósito. El mío sin duda era conocer esta disciplina que desde hacía tiempo era la espinita que iba siendo hora de quitarme. Me llamó mucho la atención el espíritu de convivencia que tenían los deportistas con su propio entorno, al que acudían con ellos, unos fotografiaban, otros animaban…. otro aspecto previo a la competición que me llamo la atención fue la disciplina que hay en la logística previa a la competición, un horario que hay para el Box, (los que no lo sepan es el punto donde se deja la bici preparada con su pegatina de número de corredor, las zapatillas de correr, las de la bici, el casco y demás accesorios) que puedan servirte durante la carrera. Nada puedes olvidar, incluso todo colocado estratégicamente para evitar pérdida de tiempo…
La comida que hice 3 horas previas a la carrera fue un menú de verduras, carne y pastas, justo acabado el almuerzo las pequeñas cosquillas por la incertidumbre del evento rondaban el estómago, me colocaba los cascos de música, charlaba con los amigos etc. para pasar el tiempo hasta que llegara la hora de salida.
Mi hora de salida era a las 18:30h en la ola 5, 30 minutos antes me dispuse a calentar, a nadar unos largos para tomar contacto con la temperatura del agua etc. La verdad que me vino a pelo ya que me sentí bastante bien y comenzaría la carrera con buenas sensaciones. La verdad que días antes estaba negativo con el nado, sin embargo fue dar el pistoletazo de salida y comenzar a nadar con el pensamiento de disfrutar de aquello, la parte negativa de la natación fue la gran cantidad de codazos, patadas y golpes en definitiva que recibíamos todos, unos por querer adelantarte y otros por querer tu adelantar…se me paso muy rápido la carrera, y acabe muy posicionado, lo que me iso tomar una actitud muy positiva para continuar con la bici, llegado al Box cogí el casco, la bici, el agua y un gel energético y muchas ganas de pedalear, la verdad que mi ritmo fue constante durante la carrera y trate de guardarme energía para cuando acabara estuviera medio en condiciones de correr. El recorrido en bici fue desde el punto de vista estético muy bonito, los agolpamientos de la gente aplaudiendo por las distintas zonas de la carrera eran continuos, las sensaciones que se pueden vivir en ese momento las sabe el que esta subido a la bici. Teniendo que ser sensato en estas palabras, no todo el oro es lo que reluce, y presencie una caída de un ciclista, incluso pude dar gracias a dios porque casi acabando la carrera en bici en una avenida una señora se cruzó y faltó el canto de un duro para estrellarme con ella, no quiero pensar como hubiera acabado la historia, a pesar del control policial que había son cosas que son inevitables. Acabada mi carrera en bici, dije ufff queda lo que en teoría mejor llevas…, «me dije a mí mismo», psicológicamente la mente te limita, te agobia… y te dice que no puedes, de hecho no lo olvidaré cuando veo, kilometro uno y digo.., «bah para tirarse al suelo»…no he empezado y no puedo tirar de mí, la temperatura de mi cuerpo era muy alta, y estaba reventado, me tomé el gel energético y traté de engancharme a algún corredor para tratar de evitar pensar lo que me quedaba corriendo, así fue y la verdad que aunque parezca increíble, se me iso tan amena la charla y todo que no noté los km hasta el final, él mismo me confesó que le pasó igual y que se alegraba de que la acabáramos juntos, es un punto a favor la que tiene ésta modalidad deportiva, el hecho de que aparte de la competitividad, hay humanidad, ves como alguien se cae de la bici y se paran 5, ves como en las previas conoces gente y luego te dan su twitter, ves que cuando mas fatigado estás hay alguien con el que hablas y entablas una conversación. El broche de oro fue llegar a la meta, una alfombra roja, gente aplaudiendo, música y algún fotógrafo, yo la acabé alzando la mano con el chaval entrando a la meta. Tengo que agradecer como luego los patrocinadores nos hacían gala de finisher con fruta, fresas, bebidas energéticas, agua etc., realmente una experiencia increíble y que será para mí el inicio de una nueva afición.